Por sus recursos naturales y todas las actividades que en ellos puede hacer, y por las zonas arqueológicas, una de las más trascendentales en el país, Palenque es visitada por miles de turistas todos los años, esperando empaparse de la rica historia y sentir la magia de los lugares más bellos y ancestrales.
Zona Arqueológica de Palenque
Ubicada a sólo 8 km. del poblado que lleva su mismo nombre, se halla una ciudad antigua de origen maya, de inagotable atractivo para el turismo internacional y que representa, sin duda, su mejor carta. La zona posee más de 200 estructuras arquitectónicas, de diferentes tamaños y variada complejidad, adaptadas a la topografía del terreno. Tanto su arquitectura como su singular arte escultórico datan del llamado "Periodo Clásico" (400-700 d. C.)
Además de la belleza y la historia de los antiguos establecimientos, por su paso se abren senderos hacia la selva y las Cascadas de Montiepá, lugar que con el paso del tiempo y el correr de las aguas ha llegado a formar caprichosas figuras en las piedras, y muy cercano a la zona, un museo resguarda tesoros arqueológicos y la historia de los descubrimientos. La zona arqueológica abre sus puertas todos los días de 8:00 a 18:00 horas.
A continuación se detallan algunas de sus más importantes construcciones.
Templo de las Inscripciones
Tercera construcción localizada al lado este de la entrada. El nombre del templo se debe a los grandes tableros con inscripciones jeroglíficas, ubicados en el corredor de entrada a su templo, éstos narran la historia del Rey Pakal, sus ancestros y su parentesco con los antiguos dioses mayas. En 1952, el arqueólogo Alberto Ruz liberó una escalinata que conducía a una cámara donde fueron encontrados los restos de Pakal y su ajuar funerario.
La Cripta
Ubicada bajo el Templo de las Inscripciones, representa los restos de una antigua cámara mortuoria. Se accede bajando por una escalera dividida en dos tramos, la entrada se encuentra a un metro y medio debajo del nivel del suelo. Cuando se hizo el descubrimiento se notó que los seis últimos escalones se habían rellenado formando una plataforma en la que se encontraron ofrendas y un entierro colectivo. La experiencia del recorrido suele erizar la piel.
El Palacio
Es un conjunto de estructuras construidas sobre una plataforma artificial; su superficie es de 100 por 80 metros. Esta construcción se distingue por su torre de cuatro lados, con una columna interior y una escalera de caracol, que se encuentra en el patio suroeste, la única construida con estas características durante el Periodo Clásico (400 – 700 d.C.). Sus tres pisos cuentan con un estrato intermedio y un corredor angosto que rodean a la columna central. Las paredes exteriores son rectángulos de mampostería gruesa que cuentan con ventanas a la altura de los pisos, decoración pictórica, relieves y jeroglíficos en estuco, tanto en paredes como en algunas de sus escalinatas.
El Templo de la Cruz
Se halla en la parte norte de la Plaza del Sol. Hay tres tumbas y un monolito conocido como La Muerta, que representa a un personaje de pie sobre un jeroglífico, dos lápidas con inscripciones y 18 cilindros de barro que representan deidades. Una de las características de esta edificación es que no cuenta con fachada por lo que se puede ver la pared central.
El Templo de la Cruz Foliada
Se localiza en el Cerro de Miramar, al norte de la Plaza del Sol. Posee una crestería que rodea al muro central y una galería interior. El muro tiene puertas con acceso a tres cuartos. En su santuario se conservan un friso con fragmentos de estuco y tres lápidas de piedra que forman el Tablero de la Cruz Foliada (cruz con hojas de maíz).
El Templo del Sol
Se localiza en el extremo oeste de la Plaza del Sol. En el santuario de este edificio se pueden admirar tres tableros de piedra calcárea en los que destacan la imagen de un escudo solar y un motivo central bellamente tallados. En el friso principal se puede apreciar la imagen de un personaje sentado en forma oriental, teniendo detrás una serpiente bicéfala, ambos tallados en estuco.
Museo de Sitio de Palenque.
El museo tiene el propósito de completar la experiencia, mostrando las diferentes temporadas de investigación en esta antigua ciudad maya. Posee dos salas llenas de la historia y el misterio que inspira la cultura prehispánica. En la primer sala, planta baja, hay exhibidas alrededor de 260 piezas entre cerámica, lítica, estuco, hueso, concha y jadeíta; en la segunda sala, está la historia gráfica y guiada de las excavaciones arqueológicas más importantes que se han hecho en Palenque, desde finales del siglo XVIII hasta la fecha.
Recursos Naturales
Parque Nacional Cascadas de Agua Azul
Se encuentra a 50 km. al sur de la ciudad de Palenque, accediendo por la Carretera No. 199, rumbo a Ocosingo, que hace frontera con el municipio de Palenque. En 1980 fue decretado como Parque Nacional, ya que las vertientes del Río Tulijá formaron un ecosistema asombroso en medio de caídas de agua.
Hay una vegetación abundante donde se pueden apreciar árboles de caoba, cedro y zapote, que son el complemento de bellas especies de mamíferos, una gran variedad de aves e insectos. En sus aguas azuladas se percibe el proceso del correr sobre las rocas, donde pequeñas partículas de cal que contienen sales de magnesio y algunos otros cloruros se disuelven para darle color. Debido a su potencial como sitio turístico, es común ver turistas volando en ultraligero sobre el parque, acampando en sus bordes o haciendo un típico paseo a pie o a caballo.
Agua Clara
Se ubica a 55 km. al oeste de Palenque, por la Carretera No. 199 y a sólo 5 km. del Parque Nacional Cascadas de Agua Azul. Se trata de una impresionante zona turística de 90 hectáreas establecida entre los grandes ríos, el Tulijá y el Shumulhá.
La amplia panorámica entre una vegetación selvática, que arrulla tucanes, palomas y periquillos, lo hacen imprescindible para hacer una expedición fotográfica, ya sea a pie o a lomo de caballo, en lo senderos más majestuosos o abriéndose camino por las pendientes montañosas. La zona ofrece los servicios de cabañas, restaurante, baños, vestidores y estacionamiento, ya que es uno de los atractivos principales de los turistas, quienes practican el kayak en el río Shumuljá, o acampan en algún espacio llano para sus aventuras. Véase la Sección Actividades.
Cascada Misol-Há
Localizada a 30 km. al suroeste de Palenque, yendo a Ocosingo por la Carretera No. 199, ésta cascada formada por las aguas del Río Tzaconejá, con una impresionante caída de 30 metros, es un atractivo turístico altamente recomendable. En sus alrededores es frecuente ver visitantes recorrer los senderos a pie o a caballo, donde se puede observar una rica vegetación compuesta por árboles de caoba, chicozapote y palo de agua; o bien, practicando en descenso en río. Debido a la nutrida asistencia de visitantes, funciona como centro turístico, ofreciendo servicio de hospedaje en cabañas, restaurante, tienda de artesanías, estacionamiento y andador turístico.
Río Usumacinta.
Rodeando a la ciudad de Palenque, éste es uno de los ríos más caudalosos de México y el más largo de América Central. En su andar, recorre una gran parte de la región noreste del estado de Chiapas y llega hasta la frontera con Guatemala. Su paisaje es majestuoso y sus aguas son perfectas para deportes excitantes como el rafting.