Apizaco, Tlaxcala
Apizaco es una joven ciudad que nació a raíz de la construcción del ferrocarril a mediados del siglo diecinueve, sus tranquilas calles y modestas construcciones recuerdan la actividad comercial que tuvo. Se caracteriza por sus muebles de madera labrados y sus célebres bastones, que posiblemente recuerden a los báculos de mando que portaban los antiguos señores indígenas.
Apizaco tiene una fuerte influencia taurina, la cual se refleja en las ganaderías que se albergan en sus límites territoriales así como las constantes corridas de toros que se festejan en su conocida Plaza de Toros.
Algunos de los lugares más visitados de esta localidad son la Basílica de Nuestra Señora de la Misericordia, Templo de Santa Anita, Templo de San Luis IX Rey de Francia, Fábrica de Hilados, Tejidos y Estampados San Luis, Estación de ferrocarril y los célebres monumentos a la Máquina de Vapor No. 212 (parte de un antiguo ferrocarril) y al Héroe de Nacozari.
El visitante podrá encontrarse con una maravillosa comunidad católica que posee varios festejos religiosos, en sus distinguidos templos, eventos en los cuales se lucen típicas costumbres de fiestas como carreras de caballos, corridas de toros y peleas de gallos.
Dentro las actividades que el turista puede realizar se encuentran el campismo, escalada en roca, rappel y cacería, pues posee tres ranchos donde esta actividad recibe un gran impulso.
Sin duda, viajar a Apizaco será encontrarse con una bella población llena de encanto en la ciudad y llena de diversión en los paisajes a su alrededor, que convertirán la visita a este destino en una experiencia inolvidable.