Cocina
Hace siglos, los primeros españoles que realizaron la explotación de minas iniciaron la primera influencia en la dieta de los primeros zacatecanos; durante el siglo XIX los franceses añadieron algunos elementos nuevos y posteriormente, durante El Porfiriato renace la ganadería lo que aumentó el consumo y la variedad de platillos con carne. En su próximo viaje descubra la riqueza gastronómica que el estado de Zacatecas conserva, verdaderos manjares que se preparan en fiestas tradicionales o en la gran variedad de restaurantes que hay en todos sus destinos turísticos.
Asado de Boda
El plato más tradicional de todo el estado, no hay duda en afirmarlo, es el conocido como “Asado de Boda”, que en su nombre lleva la fama, pues se trata de un riquísimo platillo de cerdo que se sirve en las bodas más tradicionales. A la carne frita se le añade una salsa chiles anchos rojos fritos en manteca y se termina de sazonar con pan dorado, chocolate, azúcar y varias especias para servirse con cebolla cruda y sopa de arroz.
Otros Platillos
Los zacatecanos tienen una dieta rica en carne, frecuentemente acompañando los guisos con queso fresco, asadero o añejo. Entre los más famosos platillos se encuentran la birria de carnero, barbacoa, menudo, pozole rojo, enchiladas, carne adobada en chile rojo, tostadas de cueritos, chicharrón prensado, pipián ranchero y las exquisitas gorditas rellenas de guisado.
Bebidas
Para pasar los alimentos, el ingenio del zacatecano se vale desde aguas frescas de frutas hasta las bebidas más respetables por su fuerte sabor y efecto. El Mezcal de Huitzila es, quizá, la bebida que más distingue al estado; sin embargo, los viñedos del estado producen vinos de mesa: tintos, blancos y rosados para el deleite del paladar. Otras bebidas que se consumen y son oriundas de comunidades zacatecanas son el aguamiel, el tenampa y el pulque.
Postres
Zacatecas es un digno productor de dulces regionales que harán inolvidable la última parte de la comida. Entre los dulces más tradicionales se encuentran las cocadas jerezanas, melcochas, charamuscas y jamoncillos, todos éstos, postres hechos a base de leche; los ates (dulce hecho a base de fruta hervida y azucarada) de guayaba, membrillo, calabaza, biznaga y camote; así como los quesos y miel hechos a base de tuna.
